Que la luz de Dios
nos rodee, que el
amor de Dios nos
envuelva, que con
su manto nos cubra
y que su presencia
permanezca con tod@s
Que hoy sea
lo que Dios quiera,
como Dios quiera y
cuando Dios quiera,
porque sus tiempos
son perfectos y sus
planes maravillosos.

Cada día de la semana es especial
a su manera y nos trae un conjunto
diferente de desafíos. Entre ellos,
el martes parece ser el pariente
más pobre pero de hecho es uno de
los días en que la mayoría de
las cosas se logran.
Cada nuevo amanecer es un regalo
que tenemos que aprovechar disfrutando
del nuevo día.
¡Disfruta de un lindo martes amigo!