A mi hijo: Cerré mis ojos por un instante y el pequeño niño que eras se convirtió en un hombre. Ya no puedo tenerte en mis brazos, pero te tendré siempre en mi corazón. Me has dado incontable razones para estar orgullosa de ti pero lo que me da mayor orgullo es que seas mi hijo.UN DÍA BAJÉ A MI HIJOS Y YA NUNCA LOS VOLVÍ A CARGAR Los cargué cuando se habían lastimado. Los cargué cuando estaban emocionados. Los cargué cuando estaban cansados. Los cargué cuando aún eran demasiado pequeños para ver lo que yo podía ver.

Comentarios